El interés por los estudios de América Latina fuera de la región parece haber disminuido en los últimos años y todo se debe a criterios económicos y cuestiones geopolíticas. Ha llegado la hora de revisar hacia dónde quiere ir Latinoamérica y que papel quiere desempeñar en el mundo global y trabajar en crear un modelo de estudio acorde para formar a los que serán los próximo líderes del continente.

 

America latinaEn Relaciones Internacionales uno de los campos de estudio que más ha llamado la atención e interés de diversos especialistas es el de los estudios regionales o de área. Aunque ante la actual coyuntura global este ámbito debe revisar muchas de las premisas que le dieron origen. Esto porque se considera que los espacios locales o domésticos, las dinámicas interestatales y las relaciones bilaterales poseen características particulares cuando se observan en el escenario regional, que responde no solo a una cuestión geográfica, sino que entran en juego factores políticos, económicos, culturales, étnicos y estratégicos que no son visibles en el entorno mundial. Tal situación se hizo más evidente tras el fin del Segunda Guerra Mundial, pero adquirió mayor auge con los procesos de integración regional de las décadas de 1950 y 1960, por lo que se establecieron numerosos centros de estudios europeos y latinoamericanos. No así sobre otras regiones que en ese momento eran más difíciles de identificar como una unidad o no resultaban atractivas para los estudiosos de las ciencias sociales.

El estudio de una región puede ser abordado desde una perspectiva disciplinaria particular, como ocurre en el caso de Relaciones Internacionales –y fue en alto grado el punto de partida de los centros de estudios latinoamericanos– y otros campos, o desde un enfoque trans, inter o multidisciplinario que es más común en las últimas décadas. En el caso de América Latina y el Caribe las posiciones para observar la región son diversas y eso lo muestran, en mayor o menor medida, los centros e institutos dedicados a los estudios latinoamericanos.

Los estudios regionales han pasado por periodos de más y menos auge, si se les mira desde una perspectiva académica. Pues las tendencias a la formación de especialistas en los centros académicos y de investigación responden, en buena medida, a los temas prioritarios de la agenda internacional, al igual que a las dinámicas propias de cada región. De igual forma el entusiasmo por los estudios regionales depende de las tendencias de la globalización, que se aceleraron con el fin de la guerra fría. Y en el caso de los centros dedicados a América Latina y el Caribe en Estados Unidos hay que tener en cuenta que las prioridades, en la mayoría de las ocasiones, están determinadas por quienes proveen los fondos y por la dinámica de las relaciones interamericanas, que entre 1960 y hoy han variado de manera significativa. De ahí que sea evidente una tendencia a priorizar la observación ...