Estos son los países donde si alguien está planeando un atentado no le conviene que le pillen.
Francia
Táctica: Aunque muchos estadounidenses les consideran unos blandos, la verdad es que los franceses poseen unas de las leyes antiterroristas más duras y quizá más eficaces del mundo. Las investigaciones antiterroristas se llevan a cabo bajo la supervisión de una unidad especial de magistrados con poderes sin precedentes para vigilar a sospechosos, recurrir a la ayuda de otros brazos de las fuerzas del orden y retener a los detenidos durante días sin cargos de ningún tipo. Además, los fiscales disponen de instrucciones para perseguirlos en el extranjero si los sospechosos o las víctimas son franceses. Este país tampoco se recata a la hora de deportar a clérigos musulmanes si los considera una amenaza. No es extraño que Francia esté bien preparada para la lucha antiterrorista: fue el primer país europeo que sufrió el terrorismo de Oriente Medio, durante la guerra de Argelia, en los 50.
En acción: Francia no ha sufrido ningún atentado terrorista en su suelo desde el 11-S, pero afirma haber desbaratado varios, incluidos un ataque químico planeado por agentes chechenos contra objetivos rusos en París, una bomba en uno de los aeropuertos de la ciudad y un atentado con aviones contra la Torre Eiffel.
¿Qué es preocupante? Los defensores de las libertades civiles en Francia han mostrado su preocupación porque, en algunos casos, los detenidos pueden llegar a pasar años en prisión preventiva. También son corrientes las alegaciones de malos tratos policiales, sobre todo en los barrios de mayoría musulmana.
Jordania
Táctica: Desde los atentados cometidos por Al Qaeda en noviembre de 2005 contra varios hoteles de Ammán, el rey jordano Abdalá II decidió hacer prioritaria la tarea de impedir la infiltración de terroristas de los vecinos Irak y Siria. El servicio de inteligencia de este país ha aprovechado los estrechos lazos con las tribus suníes en la provincia iraquí de Anbar para proporcionar a sus homólogos estadounidenses e israelíes datos valiosos sobre la estructura y la financiación de organizaciones terroristas. Asimismo, Jordania se enorgullece de la destreza de sus Fuerzas Especiales y ha creado un centro de entrenamiento para impartir tácticas antiterroristas a unidades militares de élite de todo el mundo.
En acción: Se sospecha que unos espías jordanos fueron quienes informaron al Ejército de EE UU sobre el paradero del líder de Al Qaeda en Irak, el jordano Abu Musab al Zarqaui, lo cual permitió que estadounidenses e iraquíes realizaran una incursión conjunta y le mataran.
¿Qué es preocupante? Los grupos de derechos humanos han criticado a Jordania por su supuesta participación en la entrega de sospechosos de terrorismo a Estados Unidos para ser torturados.
Egipto
Táctica: Nada menos que el número dos de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, dijo hace poco sobre la Seguridad del Estado egipcia: "Saben más sobre los movimientos islámicos que muchos miembros de esos movimientos sobre sí mismos". Sus seguidores tienen motivos para estar preocupados. Después de una oleada de atentados terroristas y victorias políticas de los Hermanos Musulmanes a principios de los 90, el Gobierno de Hosni Mubarak optó por una estrategia de represión implacable para luchar contra la amenaza del terrorismo y el islam político. La estrategia del Estado consiste en impedir que los Hermanos participen en el proceso político, al mismo tiempo que lleva a cabo detenciones de militantes y emplea la tortura de forma habitual con los prisioneros.
En acción: Durante los 90, el régimen egipcio eliminó prácticamente la amenaza interior de organizaciones como el Grupo Islámico y la Yihad Islámica Egipcia de Al Zawahiri, mediante ataques contra sus bases de operaciones y el bloqueo de su capacidad de transformarse en movimientos políticos legítimos. El exceso de ambición de los propios grupos contribuyó en gran parte a su caída.
¿Qué es preocupante? La organización Human Rights Watch se ha quejado de que el uso frecuente de la tortura por parte del régimen egipcio lleva a los presos a "confesar crímenes reales o imaginarios". Asimismo, los analistas ponen en tela de juicio la estrategia de reprimir a los Hermanos Musulmanes, de la que dicen que sólo sirve para reforzar el atractivo del grupo.
Singapur
Táctica: Singapur, que cuenta con un 15% de musulmanes, ha tenido gran éxito en la lucha contra grupos terroristas regionales como la Yemaa Islamiya, vinculado a Al Qaeda, mediante una mezcla de táctica dura, con fuerzas especiales y hábiles programas de rehabilitación. Después del 11-S, el país endureció su combate contra la financiación del terrorismo, y hace poco aprobó unas leyes que dan al Ejército enormes poderes para perseguir a militantes en el interior del país. Pero la estrategia de Singapur va más allá de la labor policial. Desde 2003, el Gobierno tiene en marcha un programa pionero que pretende rehabilitar a los terroristas detenidos. El Estado emplea a clérigos voluntarios que aconsejan a los presos y refutan los argumentos extremistas. Estados Unidos ha estudiado este método como posible alternativa a la prisión indefinida.
En acción: Una gran operación en 2001 logró la captura de 15 miembros de la Yemaa Islamiya que estaban planeando atentados dentro de Singapur. Desde entonces se ha detenido a unas 70 personas, un tercio de las cuales han sido liberados tras pasar por el programa de rehabilitación. La policía mantiene su vigilancia sobre los que salen de prisión.
¿Qué es preocupante? Los activistas en defensa de la democracia aseguran que el gobierno de Singapur exagera la amenaza terrorista para justificar su autoritarismo. En febrero, la policía sufrió un bochorno considerable cuando un militante de la Yemaa Islamiya se escapó por la ventana del cuarto de baño de un centro de detención.
Rusia
Táctica: En 1999, Borís Yeltsin elevó a un oscuro cargo político intermedio llamado Vladímir Putin al puesto de primer ministro y le confió la tarea de acabar con una insurgencia enfervorizada en Chechenia. Desde entonces, la lucha contra los deseos separatistas de esta región y la labor antiterrorista han caracterizado el Gobierno de Putin, que ha aumentado su popularidad, en gran parte, a partir de sus éxitos en estos ámbitos. Rusia ha llevado a cabo una despiadada campaña para erradicar a los independentistas de Chechenia y, cuando no ha atacado a los militantes, ha logrado ponerlos de su parte, al instaurar al antiguo rebelde Ramzán Kadírov a la presidencia de la región, hoy ya bastante pacífica. Las fuerzas de seguridad rusas también se han mostrado dispuestas a resolver situaciones de toma de rehenes por la fuerza, incluso a costa de un elevado número de bajas civiles.
En acción: Cuando los rebeldes chechenos capturaron un teatro moscovita en 2002, las Fuerzas Especiales rusas introdujeron un gas desconocido en el sistema de ventilación del edificio, irrumpieron en el local y mataron a casi todos los secuestradores, además de a cientos de rehenes.
¿Qué es preocupante? Aunque Rusia ha conseguido pacificar Chechenia, las regiones vecinas de Daguestán y Osetia del Norte siguen siendo refugios de grupos terroristas. El Gobierno fue muy criticado por el secretismo que rodeó las operaciones en la escuela de Beslán, en Osetia del Norte, así como por el elevado número de rehenes muertos durante el rescate.
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