De Tokio a Riad, los gobiernos están inyectando miles de millones en sus economías. Vea cuáles son los mayores beneficiados y quiénes no tienen su día de suerte.


Alemania


Paquete de estímulo: 29.000 millones de euros, aprobados en febrero.


Agraciados: Los fabricantes de automóviles. Al igual que en muchos otros países por todo el mundo, la industria automovilística alemana se ha visto muy afectada por la crisis económica global y el desplome de la demanda. Así que a nadie sorprende que el gobierno de la canciller Angela Merkel se haya preocupado de proteger los intereses de los fabricantes de coches. Concretamente, 1.500 millones de euros se destinarán a los compradores que adquieran un nuevo vehículo si el viejo tiene más de 9 años. La ayuda puede parecer una bendición para los consumidores, pero las voces críticas afirman que constituye un gigantesco subsidio indirecto a este sector, ya que los fondos sólo pueden ser utilizados con el fin específico de comprar un coche.


Perdedores: Los niños. Frente a los 2.555 euros puestos a disposición de cualquier familia que compre un coche nuevo, la ayuda del Gobierno a quienes tienen un hijo se reduce a 100 euros. Algunos analistas incluso ponen en duda que el plan de renovación de vehículos vaya a ayudar a la industria automovilística alemana, ya que, probablemente, muchos consumidores compren coches fabricados en el extranjero.





AFP/Getty Images

Japón


Plan de estímulo: 235.000 millones de dólares (187.400 millones de euros), propuestos en diciembre.


Agraciados: Las administraciones locales y el joven socio de coalición del Partido Liberal Democrático (PLD), Nuevo Komeito. Con los alrededor de 10.000 millones de dólares de generosa ayuda previstos en el paquete, el Gobierno pretende que la oposición fuera de Tokio se mantenga en niveles mínimos. Y como la popularidad del PLD se ha hundido en los últimos meses, Nuevo Komeito ha intentado ganar influencia. Falta poco para las elecciones, y la joven formación quiere utilizar este dinero para reforzar sus credenciales de paladín del pueblo. Al exigir que se destinasen fondos para los hogares y para las pequeñas y medianas empresas, Nuevo Komeito se distanció del PLD, que tiene fama de defender siempre los intereses de las grandes corporaciones japonesas.


Perdedores: Los exportadores. Como el Gobierno decidió repartir las nuevas ayudas entre los ayuntamientos, las familias y las instituciones financieras, el gran olvidado fue el sector empresarial, fuertemente dependiente de la venta en el exterior. Las exportaciones niponas disminuyeron un 45,7% respecto al año anterior –la mayor caída en 50 años. El desplome ha obligado a conocidas empresas como Toyota y Sony a bajar la producción y hacer importantes recortes de plantilla, con pocas esperanzas de recibir ayudas, salvo que se apruebe otro paquete de estímulo.



Arabia Saudí


Plan de Estímulo: 127.000 millones de dólares, anunciados en diciembre.


Agraciados: La industria petrolera, el sector inmobiliario y las regiones pobres. En teoría, un Ejecutivo que no tiene que tratar ...