Todo tipo de barreras, cada vez más sofisticadas, proliferan a lo largo del planeta. Estas divisiones físicas se han convertido en una de las soluciones preferidas por los Estados a la hora de hacer frente a las rivalidades, la inseguridad, la inmigración, la pobreza que sufre el vecino, la incapacidad para coexistir. Muros que aún permanecen, nuevos muros se alzan en el siglo XXI.