Abarcan desde los organismos intergubernamentales hasta la empresa privada, pasando por la gestión pública, la comunicación internacional o el sector de las organizaciones sin ánimo de lucro, que asciende a un 5% de la población activa en España y llega hasta un 15% en países como Holanda, según Noé Cornago, de la UPV.

 

Hace unos años la demanda de profesionales de la cooperación impulsada por la creación de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID), en 1998, y las agencias de las comunidades autónomas y grandes ayuntamientos, así como de la explosión de ONG que aparecieron, llevó al desarrollo de un número creciente de postgrados en cooperación. Esta tendencia, una vez abastecidos los grandes centros demandantes, se fue desinflando y dio paso a una mayor difusión de los estudios en el campo de las relaciones internacionales.

Ante la pregunta de si hay suficientes españoles en organismos internacionales, la respuesta de todos los expertos contactados ha sido unánime: no. España aún se encuentra infrarrepresentada en las instituciones intergubernamentales. La aportación económica del Estado español en estos organismos (entre las primeras del mundo y en aumento) no se corresponde con un número suficiente de funcionarios internacionales. "En la Unión Europea, los españoles han obtenido una presencia más que satisfactoria, en cambio, en la ONU queda terreno por conquistar", advierte el profesor Calvo-Sotelo, del IE.

Aunque lo mejor para ilustrar la meta de estos estudios es la propia experiencia de españoles que están trabajando en organismos internacionales. "Cuando estás en España, la ONU y el Banco Mundial son cosas muy lejanas en las que no sabes muy bien cómo meterte", opina Julia Barrera, relaciones externas del Banco Mundial con España, Italia, Grecia y Portugal. En esta situación se veían hasta ahora muchos jóvenes españoles interesados en los asuntos internacionales. Como consecuencia directa, los profesionales advierten respecto al aumento de participación de España en cooperación multilateral en los últimos años: "A la contribución económica no ha seguido un aumento sustancial del número de españoles en estos organismos". Opinión compartida con Rafael Calduch, catedrático de Relaciones Internacionales de la UCM: "Se necesita un incremento del número de españoles en organismos internacionales y su presencia en puestos de importancia".

Según datos de la Secretaría General de Naciones Unidas, 372 españoles (el 51% mujeres) trabajan como funcionarios internacionales del organismo, de un total de 40.000 empleados, lo que engloba a España según la propia ONU entre los "Estados miembros insuficientemente representados".

Entonces, ¿cuál es el camino hasta llegar a una organización internacional? Para Pedro Andres-Amo, oficial de operaciones de la Corporación Financiera Internacional (IFC, en sus siglas en inglés), "el conocimiento de las relaciones internacionales es muy importante pero no basta, tiene que ser un complemento a otra especialización", mientras que Julia Barrera, del BM señala que "potenciar los estudios de Relaciones Internacionales en España es una buenísima idea si el país quiere tener un papel relevante en lo internacional".

Al final, todos coinciden en los requisitos ideales: es imprescindible la realización de un máster y el perfecto dominio del inglés, sin olvidar, por supuesto, la siempre necesaria experiencia profesional.