Con una larga trayectoria jurídica, la fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional de la Haya para la antigua Yugoslavia (TPIY), Carla del Ponte, se ha enfrentado a algunos de los peores malhechores
del mundo: la
Cosa Nostra siciliana, la mafia rusa y los autores de las matanzas de Ruanda y Yugoslavia. FP habló con ella sobre sus investigaciones y sobre las posibilidades de que los criminales de guerra serbios que quedan sueltos sean llevados ante la justicia.

FOREIGN POLICY: Tras el arresto de Zdravko Tolimir, uno de los sospechosos de crímenes de guerra más buscados de Serbia, usted ha insinuado que las autoridades de este país podrían estar a punto de arrestar y entregar a muchos de los sospechosos que aún siguen sueltos, incluyendo al general Ratko Mladic. ¿A qué responde este cambio de rumbo de Belgrado?


Cortesía de la ONU

Verdad y consecuencias:
Carla del Ponte es una mujer con la que no se
juega.

Carla del Ponte: Estuve en Serbia de visita de trabajo
oficial. Me reuní con el presidente, Boris Tadic, con el primer ministro, Vojislav Kostunica, y con muchas otras autoridades, así como con representantes de los diferentes servicios implicados en los aspectos operacionales de
la cooperación con el TPIY. Todos me insistieron en lo mismo: que la cooperación plena con el Tribunal es una de las máximas prioridades del nuevo Gobierno.
Creo que este cambio de rumbo es el resultado directo de la presión de la comunidad internacional, especialmente de la Unión Europea, para que Serbia cumpla sus obligaciones. Una de ellas es cooperar totalmente, y eso incluye arrestar y entregar a todos los prófugos de la justicia, sobre todo a Ratko Mladic y Radovan Karadzic. Ahora que parece que de verdad existe voluntad política, creo que encontrarán la manera de hacerlo.

FP: Ahora que Tolimir y Vlastimir Djordjevic han sido detenidos, quedan cuatro hombres que siguen esquivando a la justicia: Ratko Mladic, Radovan Karadzic, Stojan Zupljanin y Goran Hadzic. ¿Cómo influiría su arresto en las relaciones de Serbia con la UE y en sus posibilidades de adhesión?

CdP: En su último comunicado, igual que en los anteriores, la Unión Europea ha insistido en que la cooperación plena con la justicia es un requisito para poder llevar a término las negociaciones de adhesión. De todos modos, se trata de una decisión de una entidad política. Yo soy fiscal y, como
tal, sólo me interesa la captura de los prófugos y otros aspectos de la cooperación, como el acceso a documentos y testigos.

FP: ¿Cuándo podemos esperar que se arreste a estos hombres? ¿Serbia tiene la voluntad y la capacidad
para llevarlos ante la justicia antes de que usted deje su puesto en septiembre?

CdP: Espero que podamos aguardar esas detenciones pronto.
Creo lo que siempre he creído: que, técnicamente, las autoridades serbias
son capaces de arrestar a esos fugitivos. En mi opinión, siempre ha sido
un problema de voluntad política. Ahora que eso parece haberse arreglado,
pienso que es sólo cuestión de tiempo que sean capturados y entregados.
Debido a la estrategia de finalización del Tribunal y a las resoluciones
del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en las que se establece que
el TPIY debe disolverse antes del fin de 2010, es imprescindible que estos
prófugos sean llevados sin más tardanza ante la justicia. Mladic y Karadzic,
que son considerados los artífices del genocidio de Srebrenica, siguen
sueltos después de 12 años. Es algo inaceptable. Deben ser capturados
y llevados ante el TPIY.

FP: Tras la muerte en prisión del antiguo presidente Slobodan Milosevic antes de que concluyese su juicio por crímenes de guerra, usted dijo que su fallecimiento había privado a sus víctimas de justicia. ¿Cómo influyó su muerte en el proceso de reconciliación en Serbia?

CdP: Desde mi punto de vista, su muerte significó que escapó de la justicia. Creo que ésta es un factor clave de cualquier proceso de reconciliación. Pero de todos modos no hay que olvidar otros elementos:
durante su juicio, presentamos una enorme cantidad de pruebas muy importantes, que se han hecho públicas y pueden servir de base para análisis y debates muy necesarios sobre lo que ocurrió. Además, se está juzgando a varias personas por su implicación en delitos muy parecidos. Por ejemplo, [recientemente] el Tribunal condenó a 35 años de prisión a Milan Martic, un líder político
serbocroata acusado de crímenes contra los croatas y otras poblaciones
no serbias en ciertas zonas de Croacia. Entre otras cosas, la sentencia
establece que Milan Martic participó en un plan delictivo conjunto con
Slobodan Milosevic, Milan Babic, Radovan Karadzic, Ratko Mladic, Jovica
Stanisic, Franko Simatovic y otras personas, y que el objetivo común era
la eliminación o desplazamiento forzoso de la mayoría de la población
croata, musulmana y no serbia de aproximadamente un tercio del territorio
de Croacia y de grandes zonas de Bosnia y Herzegovina, con el fin de integrar
[estas áreas] en un nuevo Estado serbio. Por tanto, otros juicios también
aportarán elementos a partir de los cuales se puede reconstruir la historia
completa. Y creo que, a largo plazo, esto ayudará a la reconciliación.

FP: ¿Qué ocurrirá con Serbia si su Gobierno no entrega a los sospechosos de crímenes de guerra?

CdP: Serbia ya se ha convertido en el único país declarado
culpable de violar la Convención sobre Genocidio [de 1948]. Y seguirá
infringiendo este importante instrumento legal, así como el Estatuto del
TPIY y numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad, mientras no arreste
y entregue a Ratko Mladic y al resto de los prófugos.

FP: La oposición de Estados Unidos a los tribunales internacionales es bien conocida ¿Ha
ayudado Washington en su labor en La Haya?

CdP: Sí, hemos recibido apoyo constante por parte
de EE UU y de muchos otros países, organizaciones internacionales,
ONG, individuos… Sin esta ayuda nunca habríamos sido capaces
de lograr lo que hemos conseguido. El ministerio fiscal ha conseguido
que se dicten las primeras condenas por genocidio desde la Segunda Guerra
Mundial, ha demostrado más allá de cualquier duda razonable
que la violación se usó como instrumento para aterrorizar
y debería ser considerada crimen contra la humanidad, ha demostrado
que los crímenes contra la población civil durante el asedio
de Sarajevo merecían la máxima condena, así como
muchos otros hechos muy importantes acerca de los crímenes cometidos
en la antigua Yugoslavia y sobre la responsabilidad individual de quienes
han sido declarados culpables. Y todo ello no habría sido posible
sin apoyo externo.

FP: Ha sobrevivido a un intento de asesinato de la Cosa Nostra, se ha enfrentado a la delincuencia
organizada en Rusia y a los genocidas de Ruanda y Yugoslavia ¿Qué es lo siguiente?

CdP: Aún no lo sé. Todavía me queda mucho por hacer aquí en el TPIY antes de que me vaya en septiembre. Hay cuatro prófugos que siguen sueltos, y pretendo hacer todo lo que esté en mis manos para que sean detenidos antes de mi partida.