1.000 millones de personas viven en condiciones infrahumanas en el mundo

1.000 millones. Ése es el número de personas que, según ONU Habitat, viven en condiciones infrahumanas a lo largo del mundo. Con historias marcadas por la miseria, la violencia o la inmigración, los habitantes de los slums o barrios deprimidos pasan a menudo desapercibidos para muchos. Estas imágenes pretenden reflejar su realidad. 


 









El Bordo (Tijuana - México). Tijuana se encuentra situada en la frontera con Estados Unidos, lo que hace de ella un imán para inmigrantes que quieren cruzar la verja en busca del sueño americano. Sin embargo, la ciudad también es destino del flujo de personas en la dirección contraria: el drama de la deportación. Alrededor de un 40% de los inmigrantes que EEUU deporta acaba en Tijuana, esperando una nueva oportunidad de cruzar al otro lado.

Estos sueños frustrados acaban enviando a sus familias a otros puntos de México con lo poco que les queda, y se ven obligados a malvivir a base de la chatarra que recogen de los vertidos de la vecina San Diego. Las autoridades de Tijuana no hacen más fácil la situación de los deportados, puesto que a menudo emprenden acciones contra ellos, incluso prendiendo fuego a sus escasas pertenencias. El derrotismo y la sensación de fracaso hacen también que muchas veces caigan presa de las bandas de narcotraficantes que pueblan la ciudad, que los utilizan como narcomenudistas a cambio de suministro de drogas o de algún escaso privilegio.

AFP/Getty Images

 

  









Orangi (Karachi - Pakistán). Con cerca de 1,5 millones de personas, es el barrio pobre más grande de Asia, aunque la falta de cifras poblacionales exactas hace pensar que alguno de los que existen en Bombay lo haya superado. Sus alrededor de 22 millas cuadradas (cerca de 57 kilómetros cuadrados) hacen de él uno de los menos densamente poblados del mundo. Esto también ha favorecido su mayor estructuración vecinal, contando ya con 13 barrios reconocidos. Su organización interna ha conseguido ejercer presión sobre las autoridades para gozar incluso de representación propia como distrito de Karachi. Gracias a ello, algunas familias han conseguido disfrutar de acceso a electricidad o agua corriente.

El hecho de que dos tercios de la población de la ciudad vivieran en barriadas pobres hizo que el Gobierno paquistaní y organizaciones internacionales llevaran a cabo programas para la mejora de las condiciones de sus habitantes. Sin embargo, estas iniciativas se han probado ineficientes, al conseguir regularizar sólo un 1% de las viviendas. Ante este fracaso de sus representantes, los habitantes de Orangi han decidido organizarse internamente para autofinanciar sus necesidades de forma comunitaria.

AFP/Getty Images

 

  









Kibera (Nairobi - Kenia). Es la barriada más grande de África, con estimaciones de hasta un millón de habitantes. Además, ...