El low cost ha llegado también a la cirugía estética, antes reservada a ricos y famosos, y más de moda que nunca tras el éxito de programas como Cambio radical. Las clases medias tienen ahora la posibilidad de transformar su imagen, sobre todo en clínicas de países en desarrollo, por la mitad de lo que les costaría en Occidente. Un negocio arriesgado, pero cada vez más lucrativo. Cecilia Ballesteros

Adictos al bisturí

La belleza natural parece un ideal obsoleto, al menos en España. Sólo el año pasado, se realizaron unas 360.000 intervenciones estéticas, por un valor total de 800 millones de euros, con un gasto medio de 2.000 euros por paciente. Y ya hay 900 cirujanos plásticos registrados, aunque se calcula que otros 5.000 médicos ejercerían esta especialidad sin la titulación adecuada. La obsesión por la imagen, una industria que mueve en el mundo más de 18.000 millones de euros, es tal, en el caso español, el primer país de Europa en este tipo de intervenciones, que este apartado entra en cálculo del IPC desde 2006. Hay casos extremos como Argentina (donde uno de cada 30 habitantes ha pasado por un quirófano) o EE UU, donde se gastaron unos 7.000 millones de euros en este concepto.

Bótox sin fronteras

 

Viajar quita años. Griegos y romanos ya se desplazaban a Epidauros o Bath para tomar las aguas: no en vano inventaron el spa. Pero el llamado “turismo médico” está convirtiendo el planeta en una gigantesca clínica global. La cara más visible del fenómeno es la cirugía plástica que puede contratarse en cientos de webs con solo teclear esas dos palabras en un buscador. Se calcula que más de 150.000 estadounidenses y europeos se desplazaron en 2006 al extranjero por este motivo. En India, con precios imbatibles y profesionales muy cualificados, esta industria moverá unos 2.000 millones de dólares en 2010.

 


Las Vegas del ‘lipoturismo’
SudáfricaTURISTAS NADA ACCIDENTALES: europeos, sobre todo.ATRACCIÓN PRINCIPAL: una tasa de cambio favorable que convierte las operaciones en auténticas gangas.‘PACK’ ESTRELLA: liposucción más safari (también llamados “safaris de las bellas y las bestias”). Incluye visitas a exclusivos salones de belleza y 10 días de postoperatorio en una villa privada. Precio: 4.819 euros.

Argentina

TURISTAS NADA ACCIDENTALES: canadienses, españoles, británicos y estadounidenses.

ATRACCIÓN PRINCIPAL: cirujanos excelentes, el idioma (en el caso de los españoles), precios irrisorios para bolsillos del Primer Mundo… y el tango.

‘PACK’ ESTRELLA: aumento de pechos. Incluye alojamiento en hoteles de cuatro o cinco estrellas durante dos semanas, asistente personal y traslados, más rutas turísticas opcionales por el país. Precio: 3.000 euros.

Malasia

TURISTAS NADA ACCIDENTALES: alemanes, franceses, británicos, árabes y
asiáticos.

ATRACCIÓN PRINCIPAL: Penang, en la costa este del país, también conocida como la “isla de la silicona”. Sol y playas paradisíacas. Anonimato garantizado.

‘PACK’ ESTRELLA: rejuvenecimiento facial. Incluye tres semanas de estancia en una suite de lujo para dos personas. Precio: 6.000 euros.

Costa del Sol y Alicante

TURISTAS NADA ACCIDENTALES: británicos y alemanes.

ATRACCIÓN PRINCIPAL: tarifas más bajas que en sus países, cirugía de primer nivel, buen clima y mejor comida.

‘PACK’ ESTRELLA: liposucción de caderas y glúteos. Incluye alojamiento en una suite de lujo de la Milla de Oro marbellí, equipada con hidrosauna, hidromasaje y jacuzzi. Precio: 12.000 euros.