El futuro de la OTAN

El futuro de la OTAN

Una infoguía de esglobal

¿Qué papel debe (y quiere) desempeñar la Alianza en un contexto geopolítico marcado por la incertidumbre? Una guía interactiva sobre las nuevas amenazas a la seguridad, los retos y las oportunidades en un mundo en constante cambio.

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Hace apenas dos años la Alianza Atlántica parecía que buscaba una misión. La anunciada salida de Afganistán abría un interrogante sobre la pertinencia, la utilidad y la sostenibilidad de una institución que ha servido de paraguas para la seguridad de Occidente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Pero los acontecimientos en el Este y en el Sur de Europa han vuelto a colocar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en la primera línea del debate sobre las estructuras de poder de este nuevo orden global que no termina de perfilarse.

En este contexto, la OTAN acaba de celebrar su mayor ejercicio militar de las dos últimas décadas: el Trident Juncture 2015, con 36.000 efectivos de más de 30 naciones y en el que España ha sido el principal escenario terrestre, Italia el aéreo y Portugal el marítimo. El ejercicio se ha presentado en algunos círculos como un modo de sacar músculo tras la escalada de tensión entre la Alianza y Rusia a raíz del conflicto en Ucrania y de la reciente incursión de aviones rusos en el espacio aéreo de Turquía.

La organización tiene hoy por delante nuevas oportunidades y, por supuesto, nuevos desafíos. El propio concepto de seguridad ha cambiado tremendamente en las últimas décadas, añadiendo campos como el ciberespacio, el cambio climático o las pandemias. Además, no se trata ya solo de estar preparado para afrontar nuevos conflictos de diferente forma que puedan afectar a sus Estados miembros. Se trata de reflexionar en relación al papel que quiere o debe desempeñar en el volátil escenario geopolítico, sobre cómo adaptarse a los nuevos tiempos en medio de fuertes presiones presupuestarias y de qué manera convencer a las opiniones públicas muy diversas sobre su relevancia.

Con este tratado, no solo estamos tratando de establecer que la comunidad del Atlántico Norte esté libre de agresiones y del uso de la fuerza, sino que también estamos luchando activamente para promover y preservar la paz en el mundo

- Harry S. Truman, presidente de EE UU, el 24 de agosto de 1949 -

Más de 60 años de historia y readaptación

La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) nació durante los primeros compases de la guerra fría en 1949 con la firma del Tratado de Washington por parte de Estados Unidos, Canadá y 10 países europeos (Reino Unido, Francia, Italia, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Dinamarca, Noruega, Islandia y Portugal). Su objetivo era contener militarmente una potencial agresión militar de la Unión Soviética.

Este escenario parecía muy posible en aquellos años, se habían vivido momentos como el Bloqueo de Berlín o el golpe de Estado en Checoslovaquia. Por su parte y con el ingreso de Alemania Occidental en la Alianza Atlántica, el bloque comunista crearía en 1955 su propia alianza militar, el Pacto de Varsovia.

El artículo 5 del Tratado de Washington refleja a la perfección el espíritu con el que nacía esta alianza: “Las partes convienen en que un ataque armado contra una o contra varias de ellas, acaecido en Europa o en América del Norte, se considerará como un ataque dirigido contra todas ellas”.

Hasta la caída del Muro de Berlín en 1989, la OTAN tuvo tres ampliaciones con cuatro miembros más: Grecia y Turquía en 1952, Alemania en 1955 y España en 1982. Además la organización cumplió con la función para la que había sido creada: disuadir a la URSS y al Pacto de Varsovia de atacar Europa Occidental. La desaparición del bloque comunista también trajo un nuevo contexto internacional que obligó a la Alianza a redefinir su rol en los 90.

La OTAN buscó este nuevo papel como instrumento de la seguridad europea y, en especial, con las misiones que asumió en los conflictos que estallaron en los Balcanes. Durante la Guerra de Bosnia (1992-1995) actuó bajo mandato del Consejo de Naciones Unidas. Aquí se produjeron las primeras acciones armadas en la historia de la Alianza, cuando tuvo que hacer cumplir las zonas de exclusión aérea y con la Operación Fuerza Deliberada, que supuso el bombardeo intenso de posiciones de los serbobosnios para obligarles a firmar la Paz de Dayton.

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La OTAN en el mundo

Miembros OTAN
Asociación para la Paz
Socios del diálogo Mediterráneo
Misiones

Tropas de los países miembros y capacidad nuclear. 3 países miembros cuentan con cabezas nucleares

Nuevas amenazas

Amenazas en el escenario internacional

Tras el final de la guerra fría y los atentados del 11S, el escenario internacional presenta una serie de nuevas amenazas a las que la OTAN ha tenido que adaptarse. Entre 1949 y 1991, el objetivo de la organización era claro: disuadir a la Unión Soviética de atacar Europa Occidental con una doctrina de contención militar clásica. Hoy en día, los aliados atlánticos tienen una variedad de retos más difusos y que requieren nuevas respuestas.

Desde los atentados de Washington y Nueva York en 2001 y, especialmente, tras la masacre cometida por Daesh en París el 13 de noviembre de 2015, el terrorismo yihadista se ha convertido en una amenaza a tener muy en cuenta para la organización.

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Tablero multipolar: aliados y rivales

Aliados y rivales de la OTAN

El mundo cada vez se está volviendo más multipolar. En este contexto, la OTAN debe redefinir sus relaciones con diversos actores internacionales. Algunos de ellos, como Rusia, se presentan como rivales. Mientras que otros, como la Unión Europea (UE) o Naciones Unidas (ONU), tienen un largo historial de colaboración. Asimismo, también se busca la cooperación más allá del marco tradicional del Atlántico Norte.

Desde el estallido de la guerra en Ucrania se habla mucho del papel de Moscú oponiéndose a los intereses de Occidente, ya no solo en el antiguo espacio soviético, sino también en otros lugares como Siria.

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Alfabeto ICAO de la OTAN

La OTAN debe mirar también mas allá de Europa. En un mundo cada vez más interdependiente, la seguridad europea va unida a la de las regiones vecinas

- Javier Solana, Secretario General OTAN (1995-1999) -

España: de los inicios tumultuosos a la plena integración

El 30 de mayo de 1982 España se convirtió en el miembro número dieciséis de la OTAN. La cuestión levantaba polémica entre las fuerzas políticas del país, todavía inmerso en la Transición. A finales de ese año, el Partido Socialista ganó las elecciones. El PSOE se había mostrado contrario a formar parte de la organización, pero una vez en el Gobierno, suavizó su postura porque abandonar la Alianza podía perjudicar las negociaciones para ingresar en la Comunidad Económica Europea (CEE).

Estados Unidos quería que España permaneciera en la OTAN, más en unos momentos en los que la tensión con el bloque comunista volvía a estar en cotas altas desde la invasión de Afganistán en 1979 por parte de la Unión Soviética. La organización no podía arriesgarse a mostrar fisuras en el escenario internacional.

Con este panorama, el Ejecutivo de Felipe González convocó un referéndum en 1986 para que los ciudadanos decidieran seguir o no en la OTAN. En cualquier caso, la permanencia de España estaba vinculada a no entrar en la estructura militar y a no admitir el despliegue de armamento nuclear en las bases en territorio español.

 

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España en la OTAN

¿Cómo será el futuro?

La OTAN debe encarar una serie de desafíos internos y externos en los próximos años. Además de las amenazas internacionales, la organización atlántica también afronta unos retos de carácter organizativo para poder adaptar sus estructuras a los nuevos escenarios.

En la esfera interna, uno de los puntos donde insiste más la OTAN es en conseguir que los 28 Estados miembros alcancen unos presupuestos militares que supongan, al menos, el 2% de los respectivos PIB para 2024. Así se acordó en la Cumbre de la OTAN en Gales en 2014. El año pasado, solo Estados Unidos (3,8%), Reino Unido (2,2%), Grecia (2,2%) y Estonia (2%) cumplían con este objetivo.

De esta manera, se pretende reinvertir la tendencia iniciada con el final de la guerra fría, cuando los aliados recortaron sus presupuestos militares. Según datos de la misma OTAN, en 1990 el gasto sumado de los 14 miembros europeos era de 314.000 millones de dólares (unos 276 millones de euros), en 2014 y con 12 Estados más, la cifra descendió a 250.000 millones de dólares.

Gastos de la OTAN

Pero los cambios organizativos que quiere la OTAN no se limitan al incremento del presupuesto. También quiere que los países miembros aumenten la coordinación de sus fuerzas. Tal y como indica el Informe Anual de 2014 de su secretario general, el que fuera primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, se espera que las fuerzas armadas de los 28 hayan mejorado sus sistemas de coordinación para operar en cualquier entorno y tipo de misión para 2020. Un ejemplo de este esfuerzo son las grandes maniobras como los ejercicios Trident Juncture 2015, que tuvieron lugar en España entre octubre y noviembre del pasado año, con el despliegue de 30.000 soldados.

En este sentido, la OTAN también aplica lo que ha aprendido en las misiones donde se han tenido que coordinar múltiples contingentes como Bosnia, Kosovo y Afganistán. La Alianza aspira a dar una respuesta ágil a posibles ataques contra un país miembro, de ahí que desde la citada Cumbre de Gales haya reorganizado su contingente de reacción rápida, para pasar a denominarse Fuerza de Muy Alta Disponibilidad, cuyo objetivo es dar respuesta a una agresión principalmente en el Este de Europa o el Báltico.

La Alianza Atlántica quiere que los países miembros no solo hagan un aumento cuantitativo de sus fuerzas, sino que también mejoren las capacidades tecnológicas de sus fuerzas armadas. Incluso la propia organización cuenta con la NATO Science and Technology Organization para trabajar en cuestiones de innovación vinculadas a defensa y seguridad.

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Para ser fuerte, la OTAN debe estar preparada. Preparada para tomar decisiones, y para adaptarse a los retos que vayan surgiendo

- Jens Stoltenberg, Nuevo secretario general de la OTAN -
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