Tal vez la crisis financiera nos haya cogido a todos desprevenidos, pero hay un grupo que se ha adaptado fácilmente a la nueva situación: los ciberdelincuentes que, según el FBI, están desarrollando una nueva modalidad de estafas on line. Un ejemplo: con una artimaña particularmente inteligente, unos delincuentes enviaron un correo electrónico fraudulento ordenando a los clientes de Wachovia que entregaran sus credenciales bancarias, debido a una futura fusión con Citigroup. Un experto en ciberdelincuencia ha comentado a Information Week que la preocupación económica podría provocar que los usuarios tomaran decisiones inadecuadas: “Si el mercado de valores está en quiebra, disminuye la confianza”. Salvo que seas un ladrón, aparentemente.