Adivinar la mente italiana

Columnista del diario milanés Corriere della Sera y
autor de
La Bella
Figura: A Field Guide to the Italian Mind (La bella figura: guía descriptiva
de la mente italiana), Beppe Severgnini es un agudo observador del carácter
y la cultura de Italia. En una conversación con Y habla sobre los
best
sellers americanos, el fracaso de los políticos italianos y por qué en
su país se prefiere escribir libros antes que leerlos.



FOREIGN POLICY. ¿Qué obras interesan más
a los italianos?

Beppe Severgnini. No nos gusta leer demasiado. La verdad
es que un libro que vende dos mil copias es considerado como un éxito. Pero hay una fuerte
pasión: en Italia hay muchos más escritores que lectores. Es
raro no conocer a alguien que no quiera publicar una novela, poema o memoria.
Sin embargo, esa misma gente no se da cuenta de que para escribir también
hay que leer; es como un músico que no escucha música o un
cocinero que no quiere comer.

FP. Pero los libros estadounidenses
se venden bien. ¿Por qué?

B. S. Porque saben cómo construir una trama que te enganche. Y cómo
narrar una historia en una película o en una novela.

FP. Muchos dicen que Italia está en declive. ¿También
su cultura?

B. S. No son los mejores tiempos. Puedo destacar algunos
movimientos en las bellas artes, la escritura, tanto de ficción como no ficción,
en las generaciones más jóvenes. Yo les llamo la
e-generación: euros, e-mail, Erasmus [programa de intercambio entre
universitarios europeos] y easyjet. Este grupo, incluyendo al novelista Niccolò Ammaniti,
la diseñadora de Gucci Frida Giannini y el pianista de jazz Giovanni
Allevi, están moviendo las cosas un poco.

FP. ¿Quién será la próxima
gran figura de la cultura italiana?

B. S. Hay científicos que nacieron en los 60 y los 70, y que están
ahora dispersos por Estados Unidos. Stefano Soatto, de 38 años, es director
del laboratorio de la vista en la Universidad de California (Los Ángeles),
y Carlo Ratti, de 35, es director de la SENSEable City Laboratory, en el Instituto
de Tecnología de Massachusetts. Tengo un sitio web llamado Italianos,
donde está la comunidad compuesta por personas nacidas en Italia pero
que viven en el extranjero y por las que siento un gran respeto. Entre los
120.000 visitantes diarios hay unos miles que, en fin, por decirlo de alguna
manera, si el próximo Gobierno italiano saliera de entre sus filas me
sentiría mucho mejor.

Adivinar la mente italiana

Columnista del diario milanés Corriere della Sera y
autor de
La Bella
Figura: A Field Guide to the Italian Mind (La bella figura: guía descriptiva
de la mente italiana), Beppe Severgnini es un agudo observador del carácter
y la cultura de Italia. En una conversación con Y habla sobre los
best
sellers americanos, el fracaso de los políticos italianos y por qué en
su país se prefiere escribir libros antes que leerlos.



FOREIGN POLICY. ¿Qué obras interesan más
a los italianos?

Beppe Severgnini. No nos gusta leer demasiado. La verdad
es que un libro que vende dos mil copias es considerado como un éxito. Pero hay una fuerte
pasión: en Italia hay muchos más escritores que lectores. Es
raro no conocer a alguien que no quiera publicar una novela, poema o memoria.
Sin embargo, esa misma gente no se da cuenta de que para escribir también
hay que leer; es como un músico que no escucha música o un
cocinero que no quiere comer.

FP. Pero los libros estadounidenses
se venden bien. ¿Por qué?

B. S. Porque saben cómo construir una trama que te enganche. Y cómo
narrar una historia en una película o en una novela.

FP. Muchos dicen que Italia está en declive. ¿También
su cultura?

B. S. No son los mejores tiempos. Puedo destacar algunos
movimientos en las bellas artes, la escritura, tanto de ficción como no ficción,
en las generaciones más jóvenes. Yo les llamo la
e-generación: euros, e-mail, Erasmus [programa de intercambio entre
universitarios europeos] y easyjet. Este grupo, incluyendo al novelista Niccolò Ammaniti,
la diseñadora de Gucci Frida Giannini y el pianista de jazz Giovanni
Allevi, están moviendo las cosas un poco.

FP. ¿Quién será la próxima
gran figura de la cultura italiana?

B. S. Hay científicos que nacieron en los 60 y los 70, y que están
ahora dispersos por Estados Unidos. Stefano Soatto, de 38 años, es director
del laboratorio de la vista en la Universidad de California (Los Ángeles),
y Carlo Ratti, de 35, es director de la SENSEable City Laboratory, en el Instituto
de Tecnología de Massachusetts. Tengo un sitio web llamado Italianos,
donde está la comunidad compuesta por personas nacidas en Italia pero
que viven en el extranjero y por las que siento un gran respeto. Entre los
120.000 visitantes diarios hay unos miles que, en fin, por decirlo de alguna
manera, si el próximo Gobierno italiano saliera de entre sus filas me
sentiría mucho mejor.

Entrevista: Davide Berretta, investigador de la edición estadounidense
de FP.