De la caída de Ahmadineyad, Assad, Castro y Chávez al ascenso de los ciberataques, las 13 principales historias que podrían dominar los titulares en 2012.

Si le pidieran que nombrara las cinco principales noticias en política internacional de 2011, probablemente no le llevaría mucho tiempo. Tendría que poner la Primavera Árabe encabezando la lista. Después vendría la eurocrisis. Encontrar a Osama bin Laden probablemente figuraría también. ¿Y luego qué? ¿Fukushima? ¿La agitación en Pakistán? ¿El año del avión teledirigido, Drone? Aquí están: las historias más importantes en política internacional para 2012.

Cambios en el liderazgo de los centros de poder de todo el mundo: De acuerdo, lo admito, ésta es demasiado fácil. Sabemos que se avecinan cambios o elecciones clave en Estados Unidos, China, México y Egipto, en importantes países de Europa y en otros lugares. Sucede cada año. Pero dada la precaria naturaleza del mundo, su propensión a la volatilidad y el lugar crucial que ocupan los países implicados, ésta será una historia dominante a lo largo del año. PETER PARKS/AFP/Getty-Images
Primeras señales de una verdadera agitación política en China: Llámenlo intuición o capacidad para leer los posos del té asociados con las recientes protestas, las críticas abiertas al Ejecutivo en temas que van desde accidentes ferroviarios a la contaminación en las ciudades, las más visibles campañas entre facciones del Gobierno chino y la expansión de los medios de comunicación social (algunos menos censurados que otros), pero los nuevos líderes chinos deberían esperar encontrarse con un electorado más irritable y con mayores dificultades para mantener el control central de la megapotencia emergente mundial. PETER PARKS/AFP/Getty-Images
Hundimiento de la dinastía Assad en Siria: De nuevo, no hace falta ser vidente para darse cuenta de esto. Los días de Bachar al Assad están contados aunque él todavía no lo sepa. Con el aguante que muestra la oposición, la creciente presión de sus vecinos y los propios pasos en falso de su Gobierno, ni siquiera esos estupendos tipos de Hezbolá serán suficientes para evitar que dirigente tenga que hacer una salida por la puerta de atrás, al estilo Mubarak. LOUAI-BESHARA/AFP/Getty Images
Lucha de poder en Pakistán: Pronosticar esto es un poco como predecir que el tiempo que hará mañana será igual al que hace hoy: existe un 85% de probabilidades de acertar. Pero los recientes rumores sobre los problemas de salud de Zardari demuestran exactamente lo nervioso que está todo el mundo. Como en Egipto, el Ejército piensa en la democracia como el equivalente político a ofrecer una gran sonrisa falsa ante las cámaras. Los servicios secretos pakistaníes (ISI) ni siquiera se molestan en sonreír (a pesar de la reacción que pueden provocar sus iniciales cuando se tatúan estratégicamente en la actriz adecuada). Quienes mueven los hilos en el país pueden decidir colocar en el poder a algún hombre de paja (un ex jugador de cricket, por ejemplo) o, simplemente, optar por la vieja escuela y tomar los edificios gubernamentales, pero en cualquier caso parece una apuesta segura que para finales del próximo año tendremos nuevos líderes en Islamabad. PETER MACDIARMID/Getty Images
Fin de Ahmadineyad en Irán: Si continúa aumentando la actual tensión entre el tipo bajito de la cazadora marrón y los mulás que se reúnen en la trastienda, no será Occidente lo que acabe con Mahmud Ahmadineyad, sino las luchas internas en el país. Él intentará conservar su puesto provocando peleas con los estadounidenses, los israelíes, los saudíes… cualquiera que se sitúe en su línea de tiro. Pero cuando tu propio pueblo y el resto del mundo ponen precio a tu cabeza, el futuro no parece prometedor. Getty Images
Recesión global con un ganador sorpresa, o dos: Los eurozombies pueden esquivar la catástrofe pero producir en su lugar un remake macroeconómico de La noche de los muertos vivientes. En una Europa abocada a la austeridad, la recesión se verá empeorada por el arrollador deterioro económico que ya se está produciendo en el mundo en desarrollo y el resultado podría ser un, aún más, pronunciado desplome en todo el mundo. Pero he aquí la inesperada consecuencia: Estados Unidos saldrá ganando, ya que es un destino para aquellos que se encuentran en medio de una de las más confusas y frustrantes huidas hacia la calidad de la historia reciente. Japón también. No es que a ellos les vaya a ir muy bien, en absoluto, pero en este concurso de feos internacionales, ellos podrían llevarse los premios a los menos feos. Getty Images
Las importantes quiebras bancarias producen mínimas reformas regulatorias: Es probable que La noche de los muertos vivientes de la eurozona provoque una Pesadilla en Wall Street y que los grandes bancos europeos, con problemas de insuficiencia de capital, todavía queden en un estado precario incluso después de que la UE ponga en marcha un apresurado paquete de ayudas. Los responsables de elaborar las políticas van a tenerlo difícil para dormir todo el año, por temor a que una subida en el mercado eche por tierra a un banco tras otro (un gran banco alemán, francés o español que se hunda como, digamos, Bank of America), y lo que se producirá como resultado será… aquí viene… más rescates. No más cortes para los bancos, ni más regulaciones. Pero sí aún más pruebas de que, en el casino financiero global, la banca siempre gana. DAMIEN MEYER/AFP/Getty Images
La propagación del extremismo en África provoca que Estados Unidos actúe: Este año presenciamos cómo bases para los aviones teledirigidos y tropas se adentraban discretamente en África. A los profesionales en seguridad, estadounidenses y occidentales en general, les preocupa el Sahel y los extremistas de toda la región, especialmente en lugares que son un depósito de recursos como Nigeria. Se prestará más atención a la presencia en la región de Al Qaeda y franquicias similares y, para finales de año, ésta será considerada la amenaza de seguridad que más ha ascendido en las listas mundiales de seguimiento. STRINGER/AFP/Getty Images
Cambio de paradigma en Oriente Medio: Como si la Primavera Árabe no fuera suficiente, los cambios continuarán durante todo 2012. China e India se convierten en consumidores de petróleo cada vez más importantes y Estados Unidos lo es cada vez menos. Crece el reconocimiento del gigante asiático como un elemento clave en lo relativo a Pakistán, Afganistán, Irán y otros asuntos relacionados, incluso si éste simula que no quiere involucrarse. Washington continúa su retirada y desplaza su atención tanto hacia el interior del propio país como a Asia, mientras se mueven más iniciativas hacia un multilateralismo perezoso o un precavido, pero selectivo, intervencionismo. Israel continúa socavándose a sí mismo con su política de asentamientos y se ve debilitado por las irreversibles tendencias demográficas. Turquía asciende y el equilibro de poder en la región se mueve a medida que el moderado eje turco-egipcio comienza a desplazarse al centro de gravedad formado por el Golfo-Arabia Saudí. La carrera armamentística nuclear se hace más reñida mientras que la inestabilidad en Islamabad se vuelve más amenazante. Y, sobre todo, el ascenso y propagación de la democracia islamista se convierte en el efecto que nadie esperaba, creando gobiernos con los que a EE UU le cuesta llevarse bien y aún más condenar, y además se tornan en una gran amenaza para los saudíes (que no pueden alegar que ésta es la única manera de proteger el islam) y los israelíes (que no podrán reclamar un estatus especial por ser la única democracia de la región). Grandes cambios. Y es probable que a los responsables de elaborar las políticas les resulte difícil no quedarse atrás, lo que causará nuevos problemas. FETHI BELAID/AFP/Getty Images
Reforzamiento de la eurozona: 2011 fue el año en el que la eurozona descubrió que no podía vivir sin ella misma. 2012 será el año en el que el largo, lento y frustrante proceso de construir nuevas y más fuertes instituciones fiscales y monetarias comience a ganar importancia. Sucederá a trompicones, y los titulares de El fin está cerca continuarán. Pero si la zona euro puede sobrevivir a su año 12, su lema para el año siguiente será lo que no nos mata nos hace más fuertes. Getty Images
Fin de Chávez y Castro: Por supuesto, lo que nos mata sí nos hace más muertos. Y Castro y Chávez son buenos candidatos para dejar este mundo en el año próximo. Incluso si no lo hacen, sus políticas experimentarán un importante declive ya que son consideradas anacrónicas e ineficaces (y en ambos países la oposición conseguirá sus mayores logros en la historia reciente en 2012). JUAN BARRETO/AFP/Getty Images
Un cibershock golpea a una de las principales economías: Stuxnet fue sólo el preludio. La secuela va a llegar pronto a su red eléctrica, sistema de transporte o mercado financiero más cercano. El resultado cambiará el modo en que los países interactúan y provocará un enorme boom de las medidas de seguridad cibernética. SCOTT NELSON/Getty Images
El regreso al poder de Putin, más complicado de lo esperado: No podría pasarle a un viril hombre de torso desnudo más simpático. Pero puede que Vladímir Putin al final no resulte más que una pobre imitación de sus modelos estalinistas, mientras que la creciente oposición en el país hace gala de unas llaves de judo con las que el propio maestro tiene problemas. Probablemente, se sobreponga pero como resultado cabe esperar inquietud y medidas de represión. ALEXEY DRUZHININ/AFP/Getty Images