
La gestión de la pandemia ha mermado la división política de Chipre, pero la normalización del libre movimiento en la isla puede demostrar una voluntad de entendimiento y de negociación, y abandonar los discursos hostiles y belicistas.
El pasado febrero Naciones Unidas anunció la convocatoria de reuniones informales entre las partes implicadas en el proceso de paz en Chipre para finales de abril. Estas reuniones tienen como objetivo encontrar puntos de acuerdo mínimos entre los participantes para así intentar retomar las anteriores y fallidas negociaciones de paz de 2017.
Este anuncio llegó después de meses de gestión de pandemia en Chipre, donde no se ha atisbado ningún intento de cooperación o colaboración entre las dos partes de la isla para hacer frente a la COVID-19. A esta división se le sumó el pasado verano una alta tensión regional, donde Grecia y Turquía protagonizaron choques políticos y militares que retumbaron también en la isla.
Más recientemente, y con un panorama regional no tan crispado, Naciones Unidas pretende devolver a la mesa de negociación a las partes implicadas en el conflicto de Chipre, y también poder contribuir a una mayor estabilidad regional.
Llegada y gestión de la pandemia
La llegada de la pandemia global a Chipre y su gestión han tenido unos altos costes políticos, económicos y sociales.
Un factor clave en la gestión de esta crisis sanitaria fue el cierre en febrero del año pasado de los pasos fronterizos entre el norte y el sur de la isla. Este cierre se llevó a cabo unilateralmente por parte de las autoridades grecochipriotas, antes de que se contabilizasen los primeros infectados por el virus, y sin previa consulta a las autoridades de la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre (RTNC). Anteriormente, los dos líderes de las comunidades chipriotas habían pactado el uso de mecanismos de cooperación para políticas de salud pública y de emergencia sanitaria.
La analista política Andromachi Sophocleous señala que “las decisiones unilaterales del gobierno de Chipre no son el camino a seguir para el proceso de paz”. Además. Sophocleous insiste en la importancia de los pasos fronterizos, ya que en el último informe de la misión de Naciones Unidas en Chipre “el secretario general invita a facilitar la circulación entre los dos territorios de la isla y a reabrir los pasos fronterizos”.
El cierre de los pasos fronterizos ha marcado la gestión de la pandemia en ambos territorios y la cooperación entre las dos entidades políticas se ha reducido a su mínima expresión.
Mientras el Gobierno grecochipriota, internacionalmente reconocido, ha tenido acceso al mercado mundial para abastecer su sistema sanitario del equipamiento necesario para combatir la pandemia, la parte norte depende mayoritariamente de abastecimientos procedentes de Turquía, el único país que reconoce este territorio.
Esta situación expuso a la RTNC a una mayor dependencia de Turquía, así que el abastecimiento de ...
Artículo
para suscriptores
Para disfrutar de todos nuestros contenidos suscríbete hoy:
Plan mensual
3,70€/mes
- Asiste a eventos en exclusiva
- Recibe la Newsletter mensual ‘Cambio de foco’ con contenidos de actualidad
- Participa activamente en la elección de los contenidos de esglobal
- Accede a todos los contenidos semanales
- Accede al archivo de artículos desde 2007
- Descarga todos los artículos en PDF
Plan anual
37€/mes
- Asiste a eventos en exclusiva
- Recibe la Newsletter mensual ‘Cambio de foco’ con contenidos de actualidad
- Participa activamente en la elección de los contenidos de esglobal
- Accede a todos los contenidos semanales
- Accede al archivo de artículos desde 2007
- Descarga todos los artículos en PDF