Desde su constitución con nuevo formato a partir de la temporada 1992-1993, la competición futbolística UEFA Champions League, organizada por la Unión Europea de Fútbol Asociado (UEFA), puede considerarse como un elemento innovador que comparte los valores preconizados por la Unión Europea: la integración y el respeto por la diversidad y la multiculturalidad.

La UEFA Champions League agrupa aproximadamente 32 equipos de unos 40 países, entre ellos los 28 miembros de la Unión Europea. El alcance geográfico de esta competición es plenamente euroasiático: Europa, Rusia, Cáucaso (Armenia, Georgia, Azerbaiyán), Oriente Medio (Israel, Turquía) y Asia Central (Kazajstán, Uzbekistán). El carácter multicultural de esta competición está igualmente consolidado por la presencia de jugadores provenientes de los cinco continentes: África, Asia, América, Europa y Oceanía.

El prestigio y la elevada popularidad de esta competición fortalecen también el acervo europeísta de integración constantemente defendido por la Unión Europea. Toda vez, el torneo propaga publicitariamente campañas sobre la solidaridad y el respeto, valores igualmente compartidos en el ideal europeísta.