PORTADA
Una mujer lee un libro durante una tarde cálida en Alemania. (Adam Berry/Getty Images)

He aquí una selección de 10 recomendaciones para disfrutarlas estas vacaciones.

 

Dos libros…

El-Salvador
Miembros del MS-13 y de la banda Barrio 18 esperan su llegada a la cárcel de máxima seguridad en Zacatecoluca.(MARVIN RECINOS/AFP/Getty Images)

Carta desde Zacatraz

Roberto Valencia

Libros del K.O., 2018

La historia de los últimos 40 años en El Salvador está marcada por la violencia. Primero, una larga y cruel guerra civil durante los 80 condicionada, como en otros países de Centroamérica, por la guerra fría. Y más tarde, tras la firma de la paz, una violencia relacionada con los grupos criminales, las maras, que no han dejado de hacerse fuertes desde los 90. El periodista del periódico El Faro, Roberto Valencia elige la biografía de un miembro de la mara Salvatrucha, Gustavo Adolfo Parada Morales, alias El directo, para contarnos la historia del país durante las últimas décadas. Parada Morales nace con el inicio de la guerra civil y termina recorriendo la mayor parte de las estaciones que componen el vía crucis de muchos jóvenes salvadoreños: pobreza, entrada en una mara, crimen, cárcel y muerte. Valencia se convierte en el biógrafo del marero consciente de que, al mismo tiempo, está escribiendo la biografía de buena parte del país. El resultado es un crónica periodística de alta calidad que no sólo informa, sino que también trata de explicar más allá de los datos y termina leyéndose como una novela en la que, sin embargo, todo es real.

 

Italia Lega Nord
Una vista general de los seguidores de Lega Nord, el partido de Matteo Salvini, en la Plaza del Duomo en Milán, Italia. Tristan Fewings/Getty Images)

La gente. Viaggio nell’Italia del risentimento

Leonardo Bianchi

Minimum Fax, 2017

En 2007, un libro de los periodistas italianos Gian Antonio Stella y Sergio Rizzo, titulado La Casta, logró poner nombre a un sentimiento bastante extendido en toda Italia: el país estaba gobernado por un colectivo de políticos que, con independencia de sus siglas partidistas de adscripción, se regían por una serie de códigos y comportamientos escasamente relacionados con los intereses generales. Diez años más tarde, el editor jefe de la edición italiana de Vice, Leonardo Bianchi, entregó a la imprenta un libro que trataba de repasar los fenómenos políticos y sociales que habían permitido que, durante la última década, las tradicionales fracturas ideológicas y sociales se redujesen, casi en exclusiva, a una sola: la gente vs. la casta. Las últimas elecciones generales –el libro se publicó unos meses antes- han ofrecido una traducción en escaños de la nueva Italia: partidos tradicionales hundidos frente al ascenso de un partido regional convertido en nacional (La Lega Nord) y un movimiento de nuevo cuño (5 Stelle). Estos dos últimos construidos en torno a una amalgama de restos ideológicos, miedos (al futuro, al extranjero) y odio a la casta (nacional y europea). Mezclando ensayo y reportaje, Bianchi recorre el país tratando de comprender el nuevo tiempo: no estamos, nos advierte, ante un episodio pasajero de “populismo”. Lo que denomina el “gentismo” es más profundo y complejo. Y, en muchos sentidos, altamente perturbador.

 

Una novela…

Francia Diversidad
Franceses caminan durante un día sin coches en París. (ZAKARIA ABDELKAFI/AFP/Getty Images)

Vernon Subutex

Virginie Despentes

Literatura Random House, 2018

Con la publicación del tercer tomo, el lector español tiene ya a su disposición la trilogía que constituye la mayor obra de la escritora francesa, Virginie Despentes. La muerte de un conocido cantante, Alex Bleach –popular rockero negro-, afecta a todos aquellos que le han conocido, comenzando por Vernon Subutex, personaje principal de la novela. Sirviéndose de los encuentros y desencuentros entre los viejos conocidos del músico, Despentes va ofreciendo los retratos complejos de todos ellos, componiendo una novela coral en la que destaca la diversidad de personas: vagabundos, guionistas, brokers de Bolsa, jóvenes franceses convertidas al islam, neonazis, antiguas estrellas del porno, votantes de Le Pen…Más allá de la trama, el lector que logre conectar con estos personajes irá descubriendo una sociedad francesa compuesta de un número creciente de personas en los límites, sin muchos horizontes socioeconómicos y con un puzle ideológico y cultural en el que siempre faltan (o sobran) piezas. “¿Por qué este país se ha vuelto loco?”, se pregunta uno de los personajes. Hace unos meses, la misma editorial reeditaba un librito de Despentes, titulado Teoría King Kong, en el que la autora, basándose en sus experiencias personales –entre otras, una violación y una temporada trabajando como prostituta- resume sus puntos de vista sobre sexualidad, género y feminismo.

 

Un cómic…

Ilegal
Migrantes y refugiados envueltos en mantas de aluminio de supervivencia esperan ayuda a bordo de un barco. (ANDREAS SOLARO/AFP/Getty Images)

Ilegal

Guión: Eoin Colfer y Andrew Donkin. Ilustrador: Giovanni Rigano

Alianza editorial, 2017

En la primera viñeta de esta histórica gráfica nos encontramos al protagonista de doce años, Ebo, embarcado en una patera, junto con otros inmigrantes, tratando de llegar a las costas europeas desde Libia. La última etapa de un viaje peligroso. Recientemente, la ONU ofrecía cifras escalofriantes sobre la ruta migratoria libia: de cada 15 muertos tratando de alcanzar Europa, 14 fallecen tras haber partido del país norteafricano. Ebo ha emprendido el viaje para reunirse con sus hermanos en Europa. El cómic refleja el trayecto por mar en la patera, y se va intercalando con capítulos que documentan el viaje de Ebo desde su pequeño poblado de Ghana hasta las costas de Trípoli durante diecinueve largos meses. Un viaje que no es tan inusual: en 2016, un tercio de los 100.000 migrantes menores de edad que llegaron a Europa lo hicieron sin la compañía de un adulto. Los autores logran acercarnos a la realidad de un viaje tan incierto y peligroso a través de la mirada del pequeño Ebo: pasará hambre y frío, se verá amenazado por las mafias migratorias y también tendrá momentos de alegría. Aunque es una obra para todos los públicos, este cómic está especialmente indicado para dar a conocer a los más jóvenes el fenómeno migratorio.

 

Dos series…

Inglaterra Mafia
Un hombre de negocios se pasea frente al Banco de Inglaterra en Londres. (DANIEL SORABJI/AFP/Getty Images)

McMafia

BBC One, 2018

Basada en el libro homónimo del periodista Misha Glenny, esta serie inglesa se ocupa de las redes de mafias internacionales. El protagonista, Alex Godman, es un joven especialista financiero londinense. Nacido en Moscú, fue criado en Reino Unido porque su padre, rico mafioso ruso, tuvo que exiliarse en la capital británica tras uno de los grandes cambios de poder en el mundo mafioso exsoviético de los 90. A pesar de no querer saber nada de la vieja vida de su progenitor, Godman termina viéndose implicado en los negocios mafiosos como único modo de proteger a su familia. Sus habilidades financieras le sirven para entablar relaciones con un mafioso israelí, con representantes del narco mexicano y con diferentes mafias centro europeas. Producida por la BBC, la serie pretende ofrecer una descripción, relativamente, realista de las altas esferas del mundo del crimen organizado. Como señaló el periodista inglés Luke Harding, antiguo corresponsal en Rusia, entre las muchas preguntas que plantea la serie está la de por qué el Gobierno británico lleva más de dos décadas permitiendo que Londres se haya convertido en una gran lavadora de dinero negro internacional, incluido el ruso. El reciente caso del atentado contra el exespía Skripal no parece que haya generado, de momento, más que una escaramuza diplomática. Londres sigue siendo “Londongrado”.

 

Brasil_Corruptos
Personas protestan en la Avenida Paulista en Sao Paulo, Brasil en contra de la corrupción y a favor de la investigación del escándalo de Petrobras. (MIGUEL SCHINCARIOL/AFP/Getty Images

El Mecanismo

Netflix, 2018

En 2014, la operación de la policía federal brasileña Lava Jato destapó una inmensa trama de corrupción que afectaba a políticos y altos directivos públicos de la joya de la corona brasileña, la empresa Petrobras. La serie se inspira en aquella investigación para describir un país en el que, según palabras del protagonista –el oficial que comenzó la investigación- la corrupción de las altas esferas está conectada con la corrupción de los grupos criminales callejeros, formando ambas parte lo que denomina “el mecanismo” que hace (mal)funcionar el país. Aunque a muchos de los protagonistas se les ha cambiado el nombre, son fácilmente reconocibles, incluidos Luiz Inácio Lula da Silva o Dilma Rousseff. Con una factura impecable, la serie ha recibido también severas críticas por algunas imprecisiones –manipulaciones, para otros- de guión: frases que no habría pronunciado Lula da Silva o personajes claves de la trama de corrupción que en la serie participan, de manera activa, en la campaña electoral cuando en la realidad se encontraban en prisión en esas fechas. Teniendo siempre en mente que no deja de ser una serie de ficción, esta producción de Netflix rodada en Brasil expone de manera entretenida –y con una relativa credibilidad- el mecanismo de corrupción política que sacudió Brasil y de cuyos efectos aún no ha logrado recuperarse.

 

Dos películas…

Israel
Un soldado israelí prepara su arma durante un conflicto con protestantes palestinos. (JAAFAR ASHTIYEH/AFP/Getty Images)

Foxtrot

Samuel Maoz, 2017

El director Samuel Maoz ha rodado, según los críticos, una de las mejores películas israelíes de los últimos años. Lo ha hecho enfrentándose a uno de los pilares esenciales del Estado de Israel: su militarización masiva, que implica a casi toda la sociedad y termina afectando dramáticamente a una parte considerable de la misma. Foxtrot está estructurada a modo de tríptico. En la primera parte, un matrimonio de mediana edad -Dafna y Michael Feldman- recibe la visita de unos militares: vienen a comunicarles que su hijo ha muerto en acto de servicio. En la segunda parte de la película, Maoz muestra la vida miserable que llevan unos jóvenes soldados encargados de vigilar un puesto de control perdido en mitad del desierto. En esta sección central, la realidad de los jóvenes se mueve entre el surrealismo cómico y la pesadilla. La tercera parte es una vuelta a la casa de los Feldman y asistimos al deterioro de la relación entre unos padres hundidos en un duelo insoportable. La visión de su país que ofrece Maoz no es agradable. Una razón para verla aparte de su calidad artística: las acusaciones de traidor que ha recibido el director por ofrecer este punto de vista, incluidas unas declaraciones de la ministra de Cultura, Miri Regev, en las que, según el director, venía a decir que Foxtrot era un intento de destruir Israel.

 

Stalin
Una mujer sostiene un retrato de la Segunda Guerra Mundial de Josef Stalin en la celebración del aniversario de la victoria ante la Alemania nazi. (Sean Gallup/Getty Images)

La muerte de Stalin

Armando Iannucci, 2017

¿Cómo murió Stalin? Durante décadas la muerte del dictador soviético estuvo rodeada de rumores. La versión de los hechos más extendida es que, tras sufrir una apoplejía, sus colaboradores más cercanos –y candidatos a sucederle- evitaron prestarle una adecuada atención médica, por lo que estuvo agonizando durante más de quince horas antes de morir. Una lenta agonía. La noche anterior, el dictador había invitado a su dacha de las afueras moscovitas a sus cómplices más cercanos -Georgi Malenkov, Lavrenti Beria, Nikita Jrushchov (interpretado por Steve Buscemi) y Nikolái Bulganin- a una velada que incluyó abundantes cantidades de vodka y el visionado de un western, a los que Stalin era muy aficionado. Esta dos últimas jornadas en la vida del georgiano y el posterior entierro le sirven al director Armando Iannucci para componer una divertidísima sátira política en la estela de El Gran Dictador o Madregilda. Una razón extra para verla: su proyección en Rusia no fue permitida por el ministro de Cultura ruso, Vladímir Medinski, a comienzos de este año.

 

Y algo de sátira…

Trump Negro
Donald Trump habla durante la campaña de las primarias del partido republicano en Dallas, Tezas. (Tom Pennington/Getty Images)

Private school negro

Walter Kamau Bell

Netflix, 2018

El humorista estadounidense Walter Kamau Bell entrelaza en este monólogo dos de los temas que más han convulsionado la política interna estadounidense en los últimos tiempos: los problemas raciales y la elección de Donald Trump. El cómico dirige la mayor parte de sus chistes contra el presidente y varios de los miembros de su Administración para demostrar que son unos racistas defensores del supremacismo blanco. Por ejemplo, al Fiscal General Jeff Sessions le dedica uno de los momentos más divertidos del espectáculo cuando afirma que era tan racista que ni siquiera fue considerado apto para ser en juez en el estado de Alabama. Residente en Berkeley, Kamau también lanza alguna que otra pulla contra la pudiente clase liberal californiana –epítome liberal de la costa Oeste-. Aunque, tal vez, el monólogo habría sido más interesante si la intensidad y el número de estos chistes hubiesen sido más elevados, a fin de cuentas, como ha recordado Thomas Frank, la clase liberal ha tenido su importante cuota de responsabilidad a la hora de agravar las guerras culturales y económicas del país. En el monólogo también se incluyen chistes sobre la educación de sus hijos, su matrimonio con una mujer blanca y sobre la identidad de los afroamericanos en la nueva sociedad estadounidense.

 

Mujeres Melbourne
Protestantes se unen en contra la Inauguración de Donald Trump como presidente en solidaridad con las marchas de Washington D.C. ( Wayne Taylor/Getty Images)

Nanette

Hannah Gadsby

Netflix, 2018

La humorista australiana Hannah Gadsby ofrece con Nanette su monólogo más personal y (dolorosamente) autobiográfico. Para ello se enfrenta, según reconoce, a sus traumas más profundos: entre otros, a la afirmación de su homosexualidad en la adolescencia y al posterior conflicto con su madre; a un episodio de violencia homófoba o a las críticas de algunas feministas –ella lo es- sobre algunos de sus espectáculos precedentes. Durante la primera parte, Gadsby aborda su vida con un humor incisivo, encadenando chistes muy divertidos al tiempo que trata de explicarles a los espectadores cómo los construye y por qué logra que les hagan gracia. Este hilo metahumorístico en la primera parte del monólogo le sirve, en la segunda, para ponerse más seria y llegar a cuestionarse si el monólogo humorístico es realmente la mejor forma de abordar todos los temas –serios y de calado- de los que se ocupa. Al terminar, se tiene la impresión de que Nanette es algo más que un buen monólogo de humor.