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Protesta con el eslogan #NoMeCuidanMeViolan después de la supuesta violación de una menor a manos de la policía mexicana, Ciudad de México, agosto 2019. ALFREDO ESTRELLA/AFP/Getty Images

El movimiento feminista México toma impulso y camina hacia su ampliación y diversificación. ¿Cuáles son sus principales retos?

La supuesta violación de una joven de 17 años por cuatro policías en Ciudad de México fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de las mexicanas. Miles de mujeres salieron a las calles movidas por una rabia nunca antes vista en una protesta feminista en el país y algunas de ellas reaccionaron aún con más virulencia a la respuesta de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien arremetió contra sus “provocaciones”. El Ángel de la Independencia, emblema de la ciudad, amaneció cubierto de pintadas contra el México “feminicida”. El movimiento feminista ha encendido la llama y trata de empujar el cambio en uno de los países más peligrosos del mundo para ellas, donde son asesinadas nueve mujeres cada día, según estima ONU Mujeres basándose en varios datos oficiales.

 

El hartazgo

Los feminicidios (así se nombra a los asesinatos por violencia machista en México) han aumentado en los últimos años. Un informe oficial del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNPS) reveló un incremento del 104% de los crímenes de esta índole en los últimos tres años. Mientras en 2015 se habían registrado 422 asesinatos de mujeres por razones de género, en 2018 la cifra alcanzó las 861 víctimas mortales. El dato, ya de por sí preocupante, no refleja el mapa completo, ya que no en todos los estados mexicanos el feminicidio está tipificado y estos crímenes se cuentan como simples homicidios, según advirtió el año pasado, como asunto a corregir, el Comité para la Eliminación de la Discriminación de la Mujer (CEDAW) de la ONU.

El 66% de las mujeres mayores de 15 años declara haber sufrido algún tipo de violencia o discriminación a lo largo de su vida, pero tan solo cerca del 10% de las víctimas decide denunciar, según la última encuesta sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) en 2016. Ya sea por falta de concienciación, miedo o vergüenza, ellas no pueden o no quieren recurrir al sistema judicial, ya de por sí profundamente deslegitimado por el clima de violencia e impunidad que se vive en el país.  El 93% de todos los delitos que se cometen en México queda sin resolverse, según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) publicada en septiembre del año pasado. No obstante, las denuncias por violencia de género y violaciones han aumentado en los últimos años, un aspecto que no tiene que ser negativo, ya que revela una menor tolerancia social hacia esta clase de delitos.

Aunque México tiene una legislación contra la violencia de género avanzada en comparación con otros países latinoamericanos, en la práctica, no se aplica. La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de ...