(Manjunath Kiran/AFP/Getty Images)
(Manjunath Kiran/AFP/Getty Images)

¿Qué materiales hacen posible la vida moderna y qué capacidad tienen para contribuir al crecimiento económico?

 

Making the Modern World: Materials and Dematerialization

Smil Vaclav

John Wiley & Sons Ltd, United Kingdom, 2014 (en ingles), 242 páginas

 

Con el transcurso del tiempo, el mundo moderno se ha vuelto dependiente de un flujo de materiales sin precedentes, hasta el punto de que hoy incluso la apuesta por los procesos de producción más eficientes y las altas tasas de reciclaje no sería suficiente para contrarrestar la demanda de materiales generada por el continuo crecimiento de la población y el aumento del nivel de vida.

Vaclav Smil realiza un estudio cronológico del uso humano de las materias primas biológicas utilizadas para su posterior procesamiento y revisa y cuantifica algunas implementaciones notables. De la Antigüedad, la Edad Media y principios de la era moderna (1500-1800), lo más destacable para Smil fue el origen y desarrollo de la metalurgia. Una expansión sin precedentes tuvo lugar con la explotación de la minería de oro y plata, principalmente de México, Perú y Bolivia, con un flujo total de plata a Europa que ascendió de 40 toneladas a principios del siglo XVI a 600 toneladas durante las cuatro últimas décadas del siglo XVIII.

Impulsada por la industrialización y la urbanización se creó la civilización material moderna, que estuvo marcada por dos procesos: un amplio aumento de extracción de materiales de construcción tradicionales y un rápido consumo creciente de metales. En el siglo XIX, por primera vez en la historia se utilizó acero barato para construir maquinaria, estructuras y aparatos construidos previamente de hierro o madera. Solo la construcción de carriles de ferrocarril entre 1850 y 1900 precisó de 20 millones de toneladas (Mt) de acero.

Por último, el autor se centra en los avances cuantitativos y cualitativos de los dos materiales que fueron claves para sentar las bases de las sociedades del siglo XX: los metales y los plásticos, los cuales sustentaron la extracción de combustibles fósiles, la industrialización, la urbanización y la evolución de los modos de transporte modernos por tierra, mar y aire.

En términos generales, la demanda de metal se multiplicó por 300 entre 1900 y 1943, alcanzando 2Mt. Este aumento sin precedentes estuvo impulsado por la construcción de aviones, principalmente en Estados Unidos, en una carrera por obtener el récord en número de aviones militares. En 2008 esta cifra se situó en 40Mt, con China como principal responsable del aumento de su producción después del año 2000.

En cuanto a los plásticos, de los 50 tipos diferentes que ofrece hoy la industria, Smil enfatiza los fertilizantes, ya que no hubiera sido posible sustentar el incremento global en el siglo XX de 4,5 mil Mt con dietas cada vez más elaboradas, sin un correspondiente incremento en las aplicaciones de nitrógeno. Así, la producción mundial de fertilizantes sintéticos aumentó de sólo 150.000 toneladas en 1920 a 3,7Mt en 1950 y a 85Mt en 2000.

 

Qué importa más

En la ...